Cloasma, máscara del embarazo, melasma… Diferentes nombres para una misma patología relacionada con la hiperpigmentación de la piel: manchas oscuras que suelen aparecer en la cara, especialmente en las mejillas, zona del labio superior y la frente, aunque también podemos encontrarlas en el cuello y antebrazos. ¿Por qué? Porque son partes de nuestro cuerpo muy en contacto con el sol, que es uno de los principales causantes de esta afección. Mejor dicho, la sobreexposición al sol y a la radiación ultravioleta.

Y ahora en verano, sin duda, el riesgo es mayor. Por eso siempre vamos a recomendarte el uso de cremas protectoras, pero no solo ahora, durante todo el año, y de forma DIARIA. Sí, es necesario recalcarlo porque nos acordamos solo de los fotoprotectores cuando vamos a la playa o a la piscina. Y si conseguimos acostumbrarnos a este sencillo hábito, protegeremos nuestra piel frente a futuras complicaciones.

¿Por qué puede aparecer el melasma?

Tranquilidad, el melasma es una patología benigna, cuya única manifestación son esas manchas de tono oscuro, simétricas y con bordes irregulares, y que no tienen ninguna consecuencia más allá del efecto antiestético. Suele afectar mucho más a las mujeres que a los hombres, especialmente a las gestantes, ya que los cambios hormonales que ocurren durante el embarazo son uno de los factores que pueden originar su aparición.

Pero además hay otras causas, por ejemplo:

  • Predisposición genética por antecedentes familiares
  • Uso de anticonceptivos orales
  • Tener un fototipo alto (piel más oscura)
  • La edad (generalmente suele aparecer a partir de los 30 años)

No obstante, como decíamos al principio de este post, la radiación solar es el principal agravante del desarrollo del melasma porque las manchas se acentúan con su exposición. Pero ten en cuenta que cuando hablamos de exposición no nos referimos solo a tomar el sol, también a su efecto en nuestra piel de manera cotidiana.

Tengo melasma, ¿qué puedo hacer?

Lo primero es asegurarnos del diagnóstico, y para ello lo mejor es consultar con un especialista en dermatología. Si se confirma el melasma, el primer consejo que te dará tu dermatólogo o dermatóloga es que te protejas del sol, no solo usando cremas fotoprotectoras sino también evitando exponerte a la radicación en las horas centrales del día, sobre todo en época estival.

También existen tratamientos que suelen ser bastante eficaces, a base de hidroquinona y otros componentes despigmentantes como el ácido tranexámico, ácido kójico, ácido tióctico, ácido azelaico, alfa-arbutina o el ácido ascórbico o vitamina C. Pero siempre deben estar indicados y controlados por los especialistas en dermatología, que van a procurarte el mejor tratamiento personalizado en función de tu tipo de piel y del tipo de manchas que tengas. Además, estos tratamientos pueden combinarse con peelings despigmentantes (realizados por dermatólogos con experiencia) para estimular la renovación de las células, o terapias con láser.

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En DermaPeople podemos ayudarte a identificar el origen de esas manchas faciales y proponerte el tratamiento más efectivo para mejorarlas. No dudes en consultarnos.